SE TOCARON MÁS QUE NOTAS
Escrito por: sol #
La música es una manera de expresar sentimientos, siendo la cuarta de las siete bellas artes y uno de los instrumentos más hermosos en mi parecer, es el piano, por lo que decidí comenzar a tocar este instrumento con el fin de desarrollar habilidades artísticas, solo que había un problema no contaba con un piano, por lo que ahorré mucho y conseguí uno a la edad de 13 años.
Busqué cursos donde instruyeran clases de piano para poder empezar a aprender lo básico; no pude encontrar nada que quedara cerca de mi casa, pero una amiga mía sí, por lo cual, me llamó para decirme que ella podría llevarme sin problemas, mientras que yo me puse de acuerdo con mi mamá para que ella nos llevara de regreso a casa. Entonces ya estaba todo listo, la madre de mi amiga nos llevaba y la mía nos recogería.
Los cursos apenas comenzaban, éramos la primera generación de un proyecto que consistía en entrenar una orquesta infantil con pianos, violines, guitarras al igual que cantantes. El maestro procedió a darnos la bienvenida, después, comenzamos a ensayar nuestra primera canción, que era “Sabor a mí”, una canción clásica, era perfecta para comenzar.
Era de esperarse que con 17 alumnos y solamente un maestro enseñándole a cada sección de instrumento, así como a los vocalistas, paso por paso iba a cansarse, por lo que contrató a otro maestro con el fin de ayudarnos, solamente que cuando llegó el otro maestro, comenzaron los problemas.
Al principio, no pasaba nada sospechoso, el saludaba con un abrazo o beso en el cachete como se acostumbra a hacer aquí en México; pero al parecer, agarró mucha confianza, pues después de unas semanas, a la hora de irnos, él quería que todas nos despidiéramos de él a fuerzas de besito, no bastaba con decirle hasta luego con algunas niñas, mi amiga fue una de ellas, pues después de decir “hasta mañana”, ella solo iba a estrechar la mano del profe ayudante e irse, sin embargo algo le impedía irse; eso era la mano del maestro que no la soltaba hasta que le diera un beso en el cachete.
Al día siguiente, estábamos ensayando el acompañamiento de la canción de “Sabor a mí”, cuando de repente, al contar los tiempos, cada vez que decía “uno, dos, tres, cuatro”, marcaba esos tiempos cerca de mi busto, causándome una incomodidad cada vez aun mayor, además su mano estaba apoyada en mis piernas, tal vez o ultimo parezca insignificante para algunos, pero otras personas estaremos de acuerdo que esa es una señal de que la persona está agarrando mucha confianza. Al final de la clase, no dije nada, hasta estar en el carro de mi mamá junto con mi amiga y mientras yo le decía que le dijéramos a nuestros padres, ella no quería, tenía miedo de que algo pasara, pero con todos los casos que he visto en las noticias, cada violación a la mujer terminaba mal, todo por no tener la oportunidad de hablar en el tiempo correcto. En ese momento le dije a mi madre lo que pasaba, el conteo en mi busto, los besos y demás. Los padres de mi amiga y los míos tuvieron una charla inmediatamente la siguiente clase con el profesor principal, dijo que no toleraría ese tipo de tratos, entre otras cosas, nunca supe si él estaba involucrado, pero si lo hubiera estado, no hubiera tomado cartas en el asunto, ya que despidió al segundo maestro antes de que empezara a tocar más que solo notas.