La Discapacidad como parte de la diversidad humana

La Discapacidad como parte de la diversidad humana

A través de la historia, quizás pocos grupos se han visto tan marginalizados y discriminados como las personas con discapacidad. La especial situación de vulnerabilidad en la que se ha encontrado – y aún se encuentra – este grupo, puede entenderse en un primer lugar al considerar el lenguaje históricamente empleado para referirse a las personas que viven con discapacidad. El día de hoy, persiste aún la tendencia de interpretar la discapacidad desde parámetros médicos, y de considerarla como un fenómeno patológico o una enfermedad; existen todavía sistemas de cuasi-segregación aún en las sociedades más progresistas, y una serie de barreras que impiden la autonomía jurídica, el acceso al empleo y el ejercicio de los derechos cívicos y políticos de las personas con discapacidad. Asimismo, las personas con discapacidad se enfrentan a una posibilidad desproporcionada de sufrir abandono por parte de sus familiares, así como “graves abusos” – dentro o fuera del ámbito familiar –, “los cuales incluyen violencia física, violencia sexual, abuso psicológico, descuido, confinamiento y amenazas verbales”, habiendo una gran cantidad de personas adultas que viven con sus padres que han sufrido estos maltratos desde la infancia (HRW México, 2019). 

En otras palabras: las personas que viven con discapacidad, tanto en México como en otros países, son víctimas de discriminación – concepto que podemos entender como “la acción de otorgar un trato de inferioridad dentro de un grupo, a algunos de sus miembros, por un motivo determinado” (Jiménez Lara & Huete García, 2002). Como respuesta a esta discriminación, la Organización Mundial de las Naciones Unidas declaró, en 1992, el día 3 de diciembre como el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, con el objetivo de “promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidades en todos los ámbitos de la sociedad y el desarrollo” (ONU, 2020). 

Pero, para hablar de la inclusión de las personas que viven con discapacidad a todos los ámbitos de la sociedad, debemos primero aprender sobre el nuevo entendimiento que se le ha dado a este concepto, el cual significa un radical cambio de perspectiva. Se trata del modelo sociológico-social-colectivo, o aquel que define la discapacidad como una construcción social; de manera que la discapacidad no es, en sí, la particularidad física o motriz, sensorial (visual o auditiva), intelectual o psíquica que experimenta el individuo, sino la “segregación u opresión, desventaja o restricción de la actividad, causada por la organización social que no atiende – o atiende muy poco – a las personas” que presentan estas particularidades (Tagle López & Castillo Fernández, 2016). De este entendimiento del concepto se deriva que no sea la parálisis en las piernas la discapacidad, sino la falta de infraestructura para que las personas que utilizan sillas de ruedas puedan moverse en los espacios públicos. O que, en las sociedades sin acceso a lentes oftálmicos, la miopía y la hipermetropía puedan llegar a ser discapacidades debilitantes para más de cien mil millones de personas (Jacobs, 2018), mientras que para la mayoría de la población mundial, son condiciones que pueden solucionarse con relativa facilidad y que, socialmente, no concebimos como discapacidades.

Partir desde este entendimiento de la discapacidad como un fenómeno social es un paso importante – pero es tan solo el primero. El segundo constituye el uso del lenguaje inclusivo y no discriminatorio. En países de habla hispana y en México, en específico, se indica que no deben utilizarse las expresiones “discapacitado”, “incapacitado”, “minusválido” (literalmente, “aquello de menor valía”), o “persona con capacidades diferentes” o “especiales” – sino “persona con discapacidad” (DIF, 2017). Asimismo, debemos modificar nuestras expresiones cotidianas de manera que no digamos que las personas “sufren discapacidad”, o “son víctimas de una discapacidad”, sino que simplemente “viven con discapacidad”, sin atribuirles este calificativo negativo desde el lenguaje.

En este Día Internacional de las Personas con Discapacidad, vale la pena reflexionar sobre la siguiente idea: 

“La discapacidad no es una condición a curar, a completar o a reparar: es una construcción relacional entre la sociedad y un sujeto” (Brogna, 2006).

Finalmente, estas reflexiones y herramientas relacionadas con el respeto a los derechos de las personas con discapacidad deben ser llevadas a la práctica. Solo así podremos ser parte de la construcción de una sociedad que se adapte para incluir a todos y a todas, y en la cual, en un futuro, las particularidades físicas, intelectuales, sensoriales o psíquicas no constituyan discapacidades, sino simplemente sean un aspecto más de la diversidad humana de la cual se componen las sociedades. 

Si quieres informarte más sobre las manifestaciones de la discriminación por razón de discapacidad en nuestra sociedad, y sobre qué puedes hacer para detenerla, te recomendamos ver el cortometraje En Tus Zapatos, de Juliana Isabel Galván Román, ganador del segundo lugar del concurso Haz Corto con la Corrupción, a Nivel Preparatoria, este año.

Referencias:

Brogna, P. (2006): El nuevo paradigma de la discapacidad y el rol de los profesionales de la rehabilitación. Revista El Cisne. Buenos Aires: Argentina.

DIF. (2017). Guía para el uso del lenguaje inclusivo desde un enfoque de Derechos Humanos y perspectiva de género. Recuperado de https://dif.cdmx.gob.mx/storage/app/uploads/public/59b/948/565/59b948565102b180947326.pdf

Human Rights Watch México (2019). “Es mejor hacerte invisible”: Violencia familiar contra personas con discapacidad en México. Recuperado de https://www.hrw.org/es/report/2020/06/04/es-mejor-hacerte-invisible/violencia-familiar-contra-personas-con-discapacidad-en.

Jiménez Lara, A. & Huerte García, A. (2002). La discrimación por motivos de discapacidad: Análisis de las respuestas recibidas al Cuestionario sobre Discriminación por motivos de Discapacidad promovido por el CERMI Estatal. Recuperado de https://sid.usal.es/idocs/F8/FDO6677/discriminacion.pdf.

Organización Mundial de las Naciones Unidas. (2020). Día Internacional de las Personas con Discapacidad: 3 de diciembre. Recuperado de https://www.un.org/es/observances/day-of-persons-with-disabilities. Tagle López, E. G. & Castillo Fernández, D. (2016). Sociología de la discapacidad. Tla-melaua, vol.10 no.40. Recuperado de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1870-69162016000200176

Daniela de la Garza

Daniela de la Garza realiza su servicio social con Líderes Ciudadanos. Es Estudiante de Derecho de quinto semestre del Tecnológico de Monterrey. Feminista.

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